El candidato Presidencial del Polo Soberano y la FNP advirtió que la
primera discriminación que el gobierno debe evitar es la que sufren los
dominicanos en su propio país, al tiempo que calificó como cínicas las
directivas de la Procuraduría General de la República sobre la
protección de minorías de trabajadores migrantes haitianos y los
integrantes de los grupos LGTB.
Pelegrin Castillo explicó que nadie debe sufrir discriminación, pero
advirtió que ese principio constitucional no debe manipularse para
otorgar tratos de privilegios a minorías que son eficaces, con asesorías
de ONGs, en la explotación su real o supuesta condición de víctimas
“El Gobierno y en especial al Procurador, son los primeros que deben saber, que la violación de las normas de nacionalización de trabajo de la regla del 80/20, son una discriminación irritante en contra las trabajadores dominicanos. Esa práctica perjudica a los dominicanos más pobres o sin calificación laboral, y a veces a los sectores medios y técnicos, y ha sido auspiciada o tolerada por los gobiernos, para complacer a sectores económicos poderosos o las presiones extranjeras. No se ve ninguna preocupación del gobierno por cambiar esa realidad”, explicó Castillo. El candidato presidencial señaló también que ninguna persona debe ser discriminada en cuanto persona por ningún motivo, pero que precisó que de eso no se puede inferir que hay que otorgar derechos que no le corresponden conforme a nuestro orden jurídico constitucional. “El Colectivo LGTB con el apoyo del Embajador Militante de los USA espira a que a sus integrantes se les otorguen en materia de derechos de familia y matrimonio un trato que no procede. Por eso es necesario que la sociedad se mantenga alerta frente a las maniobras en curso para instaurar por vía de las imposiciones de un imperialismo cultural, los llamados modelos de familias “alternativa o igualitaria”, ofensiva que debe ser resistida por el pueblo dominicano”, puntualizó Castillo . Pelegrin Castillo afirmó que en la República Dominicana, cuando se habla de discriminación, tienen más relevancia las discriminaciones que sufren las personas por su mayor edad o su apariencia física, por parte de los empleadores, o las dificultades para acceder a espacios públicos como las playas. “Es evidente que la agenda de muchas áreas del gobierno la trazan las embajadas extranjeras y los organismos internacionales, y nuestras autoridades son receptoras pasivas y acríticas de esas agendas, y eso es una expresión más de la mengua de la soberanía y autodeterminación del Estado”, denunció Castillo. Finalmente, Pelegrin Castillo recordó que las políticas sociales deben ser reenfocadas poniendo a las familias como punto central de sus preocupaciones y a los dominicanos y dominicanas como su gran prioridad.
“El Gobierno y en especial al Procurador, son los primeros que deben saber, que la violación de las normas de nacionalización de trabajo de la regla del 80/20, son una discriminación irritante en contra las trabajadores dominicanos. Esa práctica perjudica a los dominicanos más pobres o sin calificación laboral, y a veces a los sectores medios y técnicos, y ha sido auspiciada o tolerada por los gobiernos, para complacer a sectores económicos poderosos o las presiones extranjeras. No se ve ninguna preocupación del gobierno por cambiar esa realidad”, explicó Castillo. El candidato presidencial señaló también que ninguna persona debe ser discriminada en cuanto persona por ningún motivo, pero que precisó que de eso no se puede inferir que hay que otorgar derechos que no le corresponden conforme a nuestro orden jurídico constitucional. “El Colectivo LGTB con el apoyo del Embajador Militante de los USA espira a que a sus integrantes se les otorguen en materia de derechos de familia y matrimonio un trato que no procede. Por eso es necesario que la sociedad se mantenga alerta frente a las maniobras en curso para instaurar por vía de las imposiciones de un imperialismo cultural, los llamados modelos de familias “alternativa o igualitaria”, ofensiva que debe ser resistida por el pueblo dominicano”, puntualizó Castillo . Pelegrin Castillo afirmó que en la República Dominicana, cuando se habla de discriminación, tienen más relevancia las discriminaciones que sufren las personas por su mayor edad o su apariencia física, por parte de los empleadores, o las dificultades para acceder a espacios públicos como las playas. “Es evidente que la agenda de muchas áreas del gobierno la trazan las embajadas extranjeras y los organismos internacionales, y nuestras autoridades son receptoras pasivas y acríticas de esas agendas, y eso es una expresión más de la mengua de la soberanía y autodeterminación del Estado”, denunció Castillo. Finalmente, Pelegrin Castillo recordó que las políticas sociales deben ser reenfocadas poniendo a las familias como punto central de sus preocupaciones y a los dominicanos y dominicanas como su gran prioridad.
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