Ponen en libertad a hijo
víctima.--
MOCA.- Cinco de los implicados en el secuestro y posible asesinato del comerciante Ramón Antonio Sánchez Grullon, recibieron nueve meses de prisión preventiva como medida de coerción, mientras que Julio Sánchez, hijo del desaparecido fue favorecido con una garantía económica de 500 mil pesos y visita periódica al tribunal.
MOCA.- Cinco de los implicados en el secuestro y posible asesinato del comerciante Ramón Antonio Sánchez Grullon, recibieron nueve meses de prisión preventiva como medida de coerción, mientras que Julio Sánchez, hijo del desaparecido fue favorecido con una garantía económica de 500 mil pesos y visita periódica al tribunal.
La decisión fue tomada por la jueza del Tribunal de Atención Permanente, licenciada Rosa Molina.
Los imputados, sindicados como presuntos responsables del secuestro y muerte del comerciante, son los nombrados, Winston Antonio Rosa Salas, José Antonio Polanco Salcedo y José Reyes Mónica, enviados con nueve meses de prisión preventiva al Centro de Corrección y Rehabilitación de La Isleta y unos tales José Luis y Moreno o el haitiano como prófugos.
La jueza Rosa Molina, acogió una petición del licenciado Víctor Sánchez, hijo de la víctima y hermano de uno de los acusados, quien solicitó la puesta en libertad de su defendido, quien dijo que la familia Sánchez ponía como garantía todo el patrimonio familiar, porque creen ciegamente en la inocencia de su hermano Julio Sánchez.
El tribunal acogió la solicitud, mientras que los abogados de los imputados enviados a la cárcel rechazaron la decisión tomada por la jueza Rosa Molina.
El licenciado José Aníbal Carela, procurador fiscal de Espaillat, quien subió a estrado pidió un año de prisión preventiva para todos presuntos implicados en el caso.
Sin embargo, Julio Sánchez, hijo de la víctima fue favorecido con una garantía económica.
Abogados entendían que todos los implicados serian puestos en libertad, argumentándose que en los interrogatorios fueron salvajemente masacrados por los investigadores policiales, golpizas que al parecer no fueron tomadas en cuenta por el tribunal, a pesar de que estas violaciones están contempladas en el Código Procesal Dominicano.
Fuente: www.polisociales.com
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