El doctor Andrés Bautista afirmó que Hipólito Mejía y Luis Abinader al asumir el apoyo de las candidaturas a la presidencia del Partido Revolucionario Moderno (PRM) de José Ignacio Paliza y de Carolina Mejía a la secretaría general, pierden capacidad de arbitraje.
Bautista, quien aspira a reelegirse como presidente del PRM afirmó que “donde se rompe el arbitraje, se rompe la unidad”.
Sin embargo, consideró que “todo el que atente contra esa unidad no es bien visto en las filas del PRM”.
Sin embargo, consideró que “todo el que atente contra esa unidad no es bien visto en las filas del PRM”.
En visita a El Nacional el expresidente del Senado, presidente del PRM y aspirante a reelegirse en la convención venidera del 18 de febrero manifestó que los dirigentes que formaron el PRM salieron del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) porque colapsó la democracia interna y por las imposiciones de decisiones por parte de las tendencias, por lo que aseguró que se necesita una organización unida para alcanzar la meta de llegar al poder en 2020.
“Entendemos que los dos liderazgos deben mantenerse al margen de lo que debe ser una democracia funcional interna de un partido”, dijo en referencia al pacto de Hipólito Mejía y Luis Abinader para llevar a la presidencia y la secretaría general a José Ignacio Paliza y Carolina Mejía, respectivamente.
Sin embargo, durante su entrevista fue enfático en señalar que respeta la decisión del liderazgo del partido de apoyar a cualquier otro candidato, porque no es un asunto personal, sino asunto de visión.
“Por un lado, quizás, los beneficiados se sienten bien, pero por otro lado lo consideramos como un retroceso a lo que hemos pregonado, luchado y lo que sirve de fundamento al PRM, que es la democracia sana y transparente que debe reinar”, expresó el exsenador de la provincia Espaillat.
Entiende que uno de los problemas más grandes que tienen los partidos políticos es cuando no hay árbitro y por eso en el PRM él decidió no aspirar a ninguna posición electiva popular y tampoco militar en alguno de los grupos, lo que dijo fue efectivo para el exitoso trabajo como presidente de la organización.
“Se necesita un paraguas que cubra a toda la militancia, frente a los dos grupos que inciden en la organización y que vienen de otro partido hace tres años”, indicó.
Rechazó que se produzca en el proceso interno de la convención una lucha generacional, porque “hay viejos jóvenes y jóvenes viejos, en cuanto a su actitud para enfrentar las decisiones partidarias”.
Rechazó que se produzca en el proceso interno de la convención una lucha generacional, porque “hay viejos jóvenes y jóvenes viejos, en cuanto a su actitud para enfrentar las decisiones partidarias”.
Anunció para después de la convención del 18 de febrero, la celebración de un congreso para determinar el rumbo del partido en cuanto a su ideología y los planes futuros.
Se consideró apto para presidir el PRM, debido a que es el que puede “garantizar acuerdos y alianzas electorales” a favor del candidato que escoja la organización con miras a las elecciones del 2020.
Dijo que cada semana participa en reuniones con representantes de partidos de oposición, con miras a unificar criterios sobre problemas que abaten a la población.
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