El administrador de la Empresa Distribuidora de Electricidad
del Sur (Edesur), Radhamés del Carmen Maríñez, reveló hoy que el
contrato de alquiler de la sede principal de la empresa por US$300 mil
mensuales, unos RD$15 millones, ha sido renovado en los años 2005, 2010 y
2015.
Manifestó que el contrato fue firmado en el primer trimestre del año 2000 por la empresa privada Unión Fenosa, cuyas acciones fueron adquiridas posteriormente en 2003 por el Gobierno del expresidente Hipólito Mejía.
Indicó que ese contrato fue firmado a cinco años, por lo que fue renovado en el 2005 y 2010, durante las gestiones del expresidente Leonel Fernández y en el 2015, en la primera del presidente Danilo Medina.
El funcionario respondió los cuestionamientos al contrato hecho por el diputado del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), José Laluz, durante una entrevista en el programa El Sol de la Mañana, por la emisora Sol 106.5.
En la entrevista participó el diputado Laluz, en su condición de comentarista de El Sol de la Mañana y volvió a calificar el contrato como oneroso y lesivo a los intereses nacionales.
La sede principal de Edesur, un edificio de siete pisos, 2,104 metros de construcción y 263 estacionamientos, funciona en la torre Serrano, en la calle Tiradentes número 47, esquina Carlos Sánchez y Sánchez, en el ensanche Naco. Maríñez manifestó que, en esa zona, el metro cuadrado de construcción cuesta ahora 1,999 dólares por año.
Empero, indicó que en un sondeo que hizo Edesur en la zona, con 35 propiedades, determinó que que el costo promedio actual es de 2,228 dólares por metro anual.
Señaló que que con las necesidades de crecimiento de la empresa, fueron alquilados los pisos uno, dos y tres de la torre Cristal, por un costo de US$100,000 al mes.
Posteriormente, fue necesario alquilar un local para el centro de formación de la empresa por US$11,000 . “Todo eso es lo que cuesta US$300 mil dólares. Estamos hablando de unos 10,104 metros de alquiler”, explicó.
Manifestó que el contrato de la torre Serrano vence en el primer trimestre del 2020.
Los contratos de los dos edificios restantes se vencen en el 2021.
Manifestó que en el 2016 inició los intentos por mudar la empresa a otra edificación, para lo cual hizo gestiones con las administraciones de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) y del Banco Central.
Indicó que está consciente de que el pago de ese monto por concepto de alquiler eleva significativamente los gastos de la empresa y afecta su sostenibilidad.
“Nos propusimos mudarnos en el primer trimestre del año 2017 hacia un inmueble que estábamos gestionando en coordinación con la CDEEE, con Rubén Jiménez Bichara y con el Banco de Reservas”, dijo.
“No fue posible conseguir ese inmueble”, agregó, principalmente, porque existe una penalidad en caso de que el contrato de alquiler sea rescindido.
“Cuando vimos si era posible rescindirlo descubrimos que había una penalidad, había que pagar la totalidad. Eso fue lo que nos paró de habernos mudado”, precisó.
Agregó, además, que las empresas eléctricas son manejadas con déficit presupuestario y en base a subsidios.
“El plan nuestro es ir desmontando esos gastos de alquiler e irlos pasando hacia inversiones”, manifestó Maríñez.
Manifestó que el contrato fue firmado en el primer trimestre del año 2000 por la empresa privada Unión Fenosa, cuyas acciones fueron adquiridas posteriormente en 2003 por el Gobierno del expresidente Hipólito Mejía.
Indicó que ese contrato fue firmado a cinco años, por lo que fue renovado en el 2005 y 2010, durante las gestiones del expresidente Leonel Fernández y en el 2015, en la primera del presidente Danilo Medina.
El funcionario respondió los cuestionamientos al contrato hecho por el diputado del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), José Laluz, durante una entrevista en el programa El Sol de la Mañana, por la emisora Sol 106.5.
En la entrevista participó el diputado Laluz, en su condición de comentarista de El Sol de la Mañana y volvió a calificar el contrato como oneroso y lesivo a los intereses nacionales.
UN APUNTE:Manifestó que el costo de alquiler del inmueble se estableció calculando el valor del metro cuadrado de construcción en el sector Naco.
Ubicación
La sede principal de Edesur, un edificio de siete pisos, 2,104 metros de construcción y 263 estacionamientos, funciona en la torre Serrano, en la calle Tiradentes número 47, esquina Carlos Sánchez y Sánchez, en el ensanche Naco, del Distrito Nacional.
La sede principal de Edesur, un edificio de siete pisos, 2,104 metros de construcción y 263 estacionamientos, funciona en la torre Serrano, en la calle Tiradentes número 47, esquina Carlos Sánchez y Sánchez, en el ensanche Naco. Maríñez manifestó que, en esa zona, el metro cuadrado de construcción cuesta ahora 1,999 dólares por año.
Empero, indicó que en un sondeo que hizo Edesur en la zona, con 35 propiedades, determinó que que el costo promedio actual es de 2,228 dólares por metro anual.
Señaló que que con las necesidades de crecimiento de la empresa, fueron alquilados los pisos uno, dos y tres de la torre Cristal, por un costo de US$100,000 al mes.
Posteriormente, fue necesario alquilar un local para el centro de formación de la empresa por US$11,000 . “Todo eso es lo que cuesta US$300 mil dólares. Estamos hablando de unos 10,104 metros de alquiler”, explicó.
Manifestó que el contrato de la torre Serrano vence en el primer trimestre del 2020.
Los contratos de los dos edificios restantes se vencen en el 2021.
Manifestó que en el 2016 inició los intentos por mudar la empresa a otra edificación, para lo cual hizo gestiones con las administraciones de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) y del Banco Central.
Indicó que está consciente de que el pago de ese monto por concepto de alquiler eleva significativamente los gastos de la empresa y afecta su sostenibilidad.
“Nos propusimos mudarnos en el primer trimestre del año 2017 hacia un inmueble que estábamos gestionando en coordinación con la CDEEE, con Rubén Jiménez Bichara y con el Banco de Reservas”, dijo.
“No fue posible conseguir ese inmueble”, agregó, principalmente, porque existe una penalidad en caso de que el contrato de alquiler sea rescindido.
“Cuando vimos si era posible rescindirlo descubrimos que había una penalidad, había que pagar la totalidad. Eso fue lo que nos paró de habernos mudado”, precisó.
Agregó, además, que las empresas eléctricas son manejadas con déficit presupuestario y en base a subsidios.
“El plan nuestro es ir desmontando esos gastos de alquiler e irlos pasando hacia inversiones”, manifestó Maríñez.
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