viernes, 3 de octubre de 2014

El lazo rosado

Daniela Cruz Gil
daniela.cruz@listindiario.com
1. Ya regresan las campañas de prevención del cáncer de mama. Sin embargo, la enfermedad celular no se detiene el resto del año ni en este órgano del cuerpo. Sigue cobrando víctimas sin distinguir sexo, edades, títulos profesionales, cuentas bancarias, estados civiles... 
2. El cáncer nos ha robado y sigue robando las sonrisas de amigos, hijos e hijas, padres, madres, hermanos, esposos, vecinos, compañeros y compañeras de labor: gente valiosa y cercana que nos hace falta, que nos duele ver luchar por extender unos pocos años la vida junto a nosotros.
3. Toca entonces colgarse el lazo rosado no solo durante octubre, en el pecho, a la izquierda. Toca colgar en nuestra agenda diaria, los pequeños actos que contribuyen a disminuir el poder de los factores de riesgo de cualquier tipo de cáncer que pueda afectarnos.
4. Toca además, colgarnos la solidaridad: la económica, la del ánimo a los que padecen, fuerza a quienes acompañan. 
5. Este año, me colgaré el lazo rosado por Alexandra Martínez, que batalla todavía junto a su hija Yenifer. Y por Mariana Paulino Castillo, quien durante seis años fue una guerrera incansable contra la enfermedad que apagó su cuerpo, pero nunca su sonrisa.

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